Revolucion de Mayo

La abdicación de Carlos IV y su hijo Fernando VII dejó vacante el trono español por lo que los virreinatos podían tomar decisiones por sí solos. En Buenos Aires, se declaró al Cabildo como órgano representante de la voluntad popular y depositario de la soberanía y se conforma la Primera Junta de gobierno. Así comienza el proceso independentista de la Nación Argentina.

Causas:

* En la época del virreinato, el comercio exterior de Argentina estaba monopolizado por España, que no permitía el comercio con otras potencias. Esto desfavorecía a Buenos Aires.

* Había una rivalidad entre los partidarios de la autonomía y los partidarios de la realeza española.

* Cuando Buenos Aires expulso a las tropas inglesas logro un gran prestigio. Este gran prestigio fue usado por Juan José Paso para justificar en el cabildo abierto que Buenos Aires tome la iniciativa de reemplazar al virrey sin consultar a las otras ciudades. La victoria contra los ingleses alentó los ánimos independientes, ya que el virreinato logro defenderse solo, sin la ayuda de España. Durante ese conflicto se crearon milicias criollas, que luego tendrían un importante peso político.

* Algunos Revolucionarios consideraron la posibilidad de apoyar el Carlotismo, que fue un proyecto de crear en el Virreinato del Río de la Plata un reino independiente, constituido políticamente como monarquía, encabezada por Carlota Joaquina de Borbón. Algunos de estos revolucionarios fueron: Juan José Castelli, Antonio Luis Beruti, Hipólito Vieytes y Manuel Belgrano. Otros se opusieron, como Mariano Moreno y Juan José Paso.

* La declaración de independencia de los Estados Unidos en 1776 sirvió como ejemplo para los criollos de que era posible una revolución e independencia.

* Se comenzaron a difundir los ideales de la revolución francesa de 1789. La Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, cuyos principios eran: Libertad, igualdad y fraternidad, tuvo una gran repercusión en los jóvenes criollos.

* En Europa se desarrollaban las Guerras Napoleónicas, que tuvieron como consecuencia la renuncia de Carlos IV y su hijo Fernando VII, los cuales fueron reemplazados por José Bonaparte, hermano de Napoleón Bonaparte. Esto dejo el camino libre para que los virreinatos tomen decisiones por si solos.